La necesidad de acudir a putas en Valencia suele ser directamente proporcional al dinero que tienes y lo cachondo que estás. Hasta ahí cualquier cliente de este servicio puede estar de acuerdo. Sin embargo, hay otro factor que en el caso de muchos hombres suele ser decisivo: lo cómodo que está uno en su casa.
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Evidentemente, prostituirse no depende solo de este factor sino de la suma de los tres (sobre todo cachonda), pero bueno, afecta; más después de una semana de duro trabajo. Debido a esto, la pregunta de si vale la pena llamar a una prostituta en casa se está haciendo más fuerte entre quienes navegan en los directorios de prostitutas.
Es una opción que hace más bien que mal, aunque también es cierto que aquí hay algunos que no nos podemos permitir por varios motivos (no, no hablo de dinero). Aunque siempre puedes probar un trío con tu pareja. Echemos un vistazo más de cerca a continuación:
Prostitutas a domicilio: ventajas
1. La sensación de estar involucrado en una transacción comercial es mucho más suave. A ver, vamos perfecto. Cierto, es lo que es: nunca deja de ser un servicio por el que pagas; pero lo cierto es que estás en un ambiente cerrado, y te resulta tan cómodo como a cualquier otra mujer, quédate Una mejor sensación: más cerca a una fecha real que intercambiar bienes por servicios.
En este contexto, es muy útil una comparación con un burdel, donde el trato suele ser el siguiente: eliges a una chica, entras en una habitación, te lavas y antes de comenzar el prólogo, ya estás follando. vamos uno pasa.
Dicho esto, también es importante no olvidar que este es un servicio pago: 1: No pierdas el tiempo de la prostituta; 2: No pierdas tu tiempo.
2. Juegas en casa. Con público a tu alrededor todo es posible… bueno, puede que a ningún espectador le interese comprar entradas, pero jugar en casa sigue teniendo una ventaja considerable: conocer todo lo que te rodea. Puedes follártela en el sofá, en la cama, en la mesa de la cocina, o en la cama, y tener toda la tranquilidad de tu propia casa, si una pierna suelta rompe una luz, no pasa nada. Además, puedes recrear tus escenas de películas favoritas y tirar todo lo que hay sobre la mesa al suelo con un solo golpe y derribarlo.
Resulta que todas las actividades existentes se pueden realizar desde el sofá
3. Tú eliges tu plato principal. Como ya hemos comentado, el trato que puedes recibir en un burdel es muy directo, lo cual está bien en algunos casos, pero no siempre tan amable como cabría esperar. En casa, con una escort, puedes dedicar todo el tiempo que quieras al preámbulo: cena, vino, champán, unas copas de vino… justo lo que quieras, siempre que tengas dinero, claro ( el buen vino es caro).
4. No te expongas públicamente. A menos que seas tan famoso que los paparazzi acampan en tu puerta, no vas a ser escoltado por prostitutas en la calle o en un burdel. Esto es ideal para hombres que no quieren distribuir fotos en compañía de trabajadoras sexuales.
5. No tienes que mudarte de tu casa. Hay poco que añadir en este punto, aparte de: imagina estar en casa, terminar tu comida, ver tu película favorita, y cuando termina, una chica caliente en buena forma llama a la puerta y quiere tener sexo contigo. Salvo que seas una persona muy (muy) afortunada, no creo que te vaya a pasar sin la ayuda de una prostituta.
6. Las putas pueden sentir más excitación sexual en un entorno nuevo y desconocido. Esto es lo que nos pasa a todos, y también nos pasa a las trabajadoras sexuales. Nuevo emocionante. Si tienes sexo en tu casa, también lo excitará más (quién sabe). Aunque es opcional.
Hervir a fuego lento
7. Capacidad para negociar precios. Aunque innatamente pagará más por los servicios porque una prostituta se muda a su casa, su disposición a negociar es mucho mayor que de otra manera. Algunas prostitutas se comunican muy bien con los clientes a la hora de negociar y bajar precios, sobre todo si necesitas unas horas.
En el camino, es importante recordar a nuestros lectores que negociar un precio es algo que se puede hacer en muchas situaciones. Incluso en los burdeles donde en principio no hay mucho margen de maniobra, se puede hablar de la posibilidad de realizar descuentos. Si la casa no está disponible para usted, como último recurso, puede negociar sin tarifas de transporte y reclamar que hay otras casas disponibles para usted.
Prostitutas en la Casa: Desventajas
1. Pagaste un precio bastante alto. Lo más barato es ir a un burdel, aunque las prostitutas independientes suelen negociar precios. Puedes bajar el precio si te mueves con inteligencia, pero siempre será más caro. Ya sabes: las cosas buenas se pagan.
2. Tuve que encontrar la impresión. Como si nos enfrentáramos a algunos policías de la serie CSI, lo normal es que si tenemos familia o vivimos con alguien de quien nos queremos ir y nuestra visita tiene un final feliz, buscamos todas las pistas y detalles posibles que dejan las prostitutas: cabello, ropa, joyería, maquillaje, líquidos, etc.
3. Malditos vecinos entrometidos. Así como para algunas personas es más conveniente vernos con nuestras parejas sexuales en público, para otras es el menor interés que tienen cuando las ve alguien que vive cerca, o porque pueden decírselo a sus familiares, o simplemente porque tendrán que dar explicaciones. a ellos más tarde. Dependiendo de cada situación, será conveniente hacer una cosa u otra.
Ahora que ya sabes cuáles son los pros y los contras de las prostitutas en Valencia a domicilio, puedes decidir si utilizar los servicios que te ofrecen.
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